En plena era de la información y de la globalización la humanidad fue golpeada por una pandemia y a partir de ello los avances en la ciencia y la tecnología a todo nivel son los que deben permitir que las personas retomen sus actividades con la seguridad de que a través de ciertos cambios tanto en las prácticas de limpieza y tecnología instalada en sus lugares de trabajo, no habrá un riesgo de contagio. Garantizando así que la reactivación económica y productiva no generen un rebrote de contagios o que a su vez la preocupación de los colaboradores que no permita que brinden el máximo de su desempeño.

Más allá de la implementación de equipos que permitan la desinfección de áreas y equipos realicen el trabajo de sanitización se buscan soluciones que generen un impacto real para frenar los contagios de COVID 19 sin que esto implique una gran inversión administrativa.

En el marco de esa necesidad y de que las personas vuelvan al trabajo presencial la tecnología toma un papel transcendental de ahí que BT como empresa de soluciones tecnológicas esté en la búsqueda y desarrollo constante de nuevos recursos basados en normativas técnicas internacionales y locales para brindar esa seguridad a sus clientes y en este post vamos a hablar sobre éstos.

La Sociedad Americana de Ingenieros de Calefacción, Refrigeración y Aire Acondicionado, ASHRAE, por sus siglas en inglés ha realizado declaraciones sobre la transmisión de SARS-CoV-2 en donde se indica que “La transmisión … por el aire es lo suficientemente probable como para que la exposición por vía aérea al virus deba ser controlada.”  De esa forma los sistemas de climatización, calefacción y ventilación  a través de su control pueden reducir la concentración de virus en el aire.  Para garantizar este funcionamiento se tienen dos acciones a tomar.

Según un estudio publicado por el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos el virus puede sobrevivir en el aire con gotículas de 2.5 micrones de diámetro hasta tres horas, es por ello que el gobernador de New York ordenó que los centros comerciales que busquen retomar sus actividades deben tener instalados  filtros de partículas de aire de alta eficiencia refiriéndose a los filtros HEPA los cuales tienen un nivel de filtrado conocido como MERV que va de 1 a 20  se escoge el nivel de acuerdo al lugar donde se va a instalar por ejemplo una edificación standard se utiliza un filtro MERV 13, y en un hospital se suele instalar un filtro de nivel 20.  De esta forma la instalación de filtros HEPA en los sistemas de HVAC brinda la seguridad de mantener el aire completamente limpio tanto para los colaboradores y clientes.

La segunda acción a tomar para reducir la concentración de aire es la instalación de un sistema que a través de un sensor de CO2 que indique la presencia de partículas en el aire  encienda el sistema de ventilación mecánica y aire acondicionado, de manera que el sistema por si mismo no permita que exista un alta de densidad de partículas en el aire brindando a los usuarios una mejor calidad de aire y reduciendo el riesgo de contagio.

Por otro lado, al ingreso a las instalaciones de trabajo y en todo ámbito usamos distintos equipos como lectores biométricos, lectores de tarjetas, puertas de acceso que pueden resultar un foco de contagio por el constante contacto con diferentes personas. Es por ello que las tecnologías sin contacto son una herramienta para combatir el contagio entre colaboradores y usuarios.

Para este tema se tienen soluciones como el reemplazo de lectores biométricos dactilares por lectores biométricos sin contacto con tecnologías de reconocimiento facial o reconocimiento de forma de mano sin contacto. Además las lectoras de tarjetas pueden ser reemplazadas por una tecnología emergente que son las credenciales móviles en las que no es necesario que se haga contacto la tarjeta, sino que a través de NFC y bluetooth se hace la validación entre la lectora y una credencial móvil instalada en el celular inteligente. Esta tecnología se puede utilizar no solo para el acceso a determinadas áreas, sino que permite realizar pagos de distintos productos o servicios.

Nos encontramos en una etapa en la que la reactivación económica es indispensable  para el incremento de la producción y generación de empleo por lo cual  brindar bioseguridad permitirá que la reapertura sea ordenada y se eviten rebrotes de contagio, todo esto lo podemos lograr a través de la implementación de herramientas tecnológicas que mitiguen los riesgos de los empleados y de los propios clientes.