Alrededor del mundo uno de los sectores que más se ha desarrollado es el de la construcciones inteligentes cuyo gasto global ascendido a 5816 millones de euros y en 2020 se preveía que esta se triplique, este es un indicativo significativo de la aceptación y desarrollo de está área.
Un edificio inteligente es una construcción en la cual sus sistemas funcionan en forma integrada y automatizada, para brindar comodidad a sus ocupantes, reducir los costos de operación, crear ambientes seguro, eficiente, flexible y adaptativo como una forma de mejorar la productividad de los usuarios.
La eficiencia es la principal ventaja de un edificio inteligente, ya que se controla el consumo de los recursos energéticos en cuanto a iluminación, aire acondicionado, ventilación mecánica a partir de la automatización logrando un alto grado de rendimiento de energía y equipos sin disminuir el grado de confort para los usuarios. Además toda la información de recursos vs gastos, uso, tiempo de vida, entre otras variables son accesibles en tiempo real tanto para las usuarios del edificio permitiendo la toma de decisiones objetivas basadas en datos reales y técnicos proporcionados por la plataforma.
Por otro lado, en marzo de 2020 declaró pandemia al brote de coronavirus esto ha causado una crisis económica a nivel mundial por lo cual es de gran importancia que los recursos económicos, humanos y naturales sean aprovechados en su máxima capacidad, es ahí donde la eficiencia juega un papel importante.
Previo a la pandemia las soluciones en edificios implementadas con ECOSTRUXURE de SCHNEIDER ELECTRIC lograban una reducción del hasta el 30 % de los consumos energéticos gracias a la automatización de sistemas de iluminación y de aires acondicionados. Además gracias al confort obtenidos con estos sistemas, las enfermedades laborables tuvieron una reducción de hasta el 3 %. Estos son los indicadores de eficiencia de los edificios inteligentes.
En la actualidad la automatización y la información que las edificaciones inteligentes generan permiten la toma de decisiones inmediatas, lo que ha permitido que los administradores de las edificaciones realicen las configuraciones adecuadas para el cambio de horarios de operación de sistemas como iluminación y aire acondicionado. Además del cambio del set points para evitar el uso inadecuado del equipamiento y con estas acciones conseguir eficiencia lo que se transforma en ahorro de recursos.
Las edificaciones tradicionales no permiten el despliegue de decisiones de forma inmediata e inteligente lo cual complica el cambio constante a la cual estas estarán sometidas con el retorno a la nueva normalidad , además es vital que estas edificaciones permitan configuraciones que garanticen el distanciamiento social y calidad de aire, lo que disminuyen la probabilidad de contagio. Las soluciones implementadas por BT permiten a los usuarios la automatización de los sistemas de aire acondicionado mediante sensores inteligentes SMART – X de SCHNEIDER ELECTRIC, los cual integrados a las controladores de la línea MP-X logran una inteligencia adecuada para conseguir el control adecuado de la humedad relativa recomendado por la ASHRAE de 50 – 60 % en la cual los virus no tienen una ambiente adecuado para su proliferación.
También la inteligencia en el control de acceso garantiza que la ocupación de las edificaciones sea la adecuada para el distanciamiento social; SECURITY XPERT DE SCHNEIDER ELECTRIC posee la ocupación de áreas con lo cual se garantiza que según las configuraciones de los administradores se generen alarmas y acciones para evitar aglomeraciones.
La importancia de las edificaciones inteligentes en la actualidad no se limita al ahorro de recursos económicos sino a garantizar ambientes seguros para los colaboradores y usuarios, por ende co-ayudar a la reducción de la pandemia. En BT nos comprometemos con la sociedad y nuestros clientes para colaborar con el cumplimiento de los objetivos y maximizar el uso de los recursos.